Procesos de creación, metodologías y producción
Reflexión y conclusiones
Reflexión y conclusiones
La idea principal que subyace en mi cabeza después de todo este conversatorio, es realmente la importancia de conseguir unificar los trabajos de tantas iniciativas tan fantásticas que se desarrollan en todo el mundo; al igual que ocurre con cualquier disciplinar artística, creo que es muy necesario empezar a redactar y codificar todos estos procesos pedagógicos y artísticos que están siendo el germen de lo que hoy en día se conoce como “artes escénicas inclusivas”.
Ha sido especialmente interesante pensar, antes de esta ponencia, en aquellas metodologías o técnicas que yo utilizo tanto en mis clases como a la hora de crear; y en ese punto, me quedo con las palabras de Antonio Quiles: “la danza contemporánea es inclusiva en sí misma”; esto me lleva a preguntarme: ¿existen algunas disciplinas artísticas y especialidades de ciertos campos que son excluyentes? Reflexiono sobre todos aquellos procesos que he podido estudia sobre el psicoballet en Cuba que, si bien es cierto que tiene un carácter terapéutico, en sí mismo se utiliza la técnica de la danza clásica y creo que en sí mismo esta técnica (por mi experiencia educativa y profesional) no se adapta ni a los valores ni principios de lo que la danza inclusiva busca; es por ello muy importante para mí preguntarse: ¿no estaremos en un momento donde hay que revolucionar el campo de aplicación de las artes en la diversidad ya sea con un objetivo artístico, terapéutico e incluso comunitario?
En el campo de la creación, coincido absolutamente con las palabras de Carolina sobre la importancia de saber disgregar entre qué es profesional y qué no, para poder avanzar en la ruptura de los estigmas de la sociedad a lxs artistas y compañías diversxs, sin embargo, debemos tener cuidado porque creo que es igualmente importante seguir fomentando la educación artística y plantear realmente que lo importante es el medio, el camino, y no el fin. Lo importante de la educación artística es desarrollarse como ser humano gracias a este campo y, posteriormente, trabajar desde la humildad y el corazón, para poder traspasar este sentimiento al público
Como conclusión, me gustaría decir que me siento muy contento de ver que, en términos generales estoy muy de acuerdo con las metodologías a trabajar y sobre todo, con la idea de que el arte tiene que ser ese vehículo para poder transformar la sociedad; además, me llevo algunas conceptos muy interesantes como “arte expansivo” que creo que son muy interesantes a la hora de reconstruir conceptos, así como con el gusto de ver que, aunque separados por miles de kilómetros lxs profesionales y las instituciones que se dedican a este campo, aunque con diferentes palabras, hablamos el mismo lenguaje a la hora de seguir trabajando desde la discapacidad y para la discapacidad, para transformar el mundo mediante el arte. Muy interesante también observar, que estas compañías han dado un paso más allá en la “normalización” y que los temas de los que tratan no se centran sólo en la defensa de derechos y libertades en la escena, si no que se tratan temas de todo tipo, algo que creo que es fundamental en un mundo que, si algo ha demostrado el 2020, es fiero e incierto; igualmente decir, que estoy deseando poder volver a la “normalidad” para poder volver a sentir el arte y a vibrar en las aulas y la escena, porque yo tampoco soy muy defensor de una “virtualización” de las artes escénicas.